El alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, ha lanzado una contundente denuncia al Gobierno Nacional, revelando que algunos lugares en la ciudad están operando como bares clandestinos bajo la fachada de sindicatos. En su llamado urgente al Gobierno Petro, Galán exige regulaciones más estrictas para evitar que estas organizaciones sean utilizadas con fines ilegales que afectan la seguridad y el bienestar de los ciudadanos. ¿Qué tan grave es esta problemática y qué medidas se tomarán para enfrentarla?
El alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, ha reiterado su solicitud al Gobierno Nacional para que refuerce la regulación y vigilancia de las sedes sindicales en la ciudad, denunciando que algunas de estas están siendo utilizadas como fachadas para llevar a cabo fiestas clandestinas y actividades ilegales. Galán destacó que esta problemática afecta principalmente a sectores del sur de Bogotá, donde estas supuestas sedes sindicales se han convertido en espacios de consumo y venta de drogas, robos, riñas e incluso ingreso de menores de edad.
El mandatario instó al Ministerio de Trabajo a intervenir para garantizar que estas sedes respeten su función constitucional, evitando que se desvirtúe su propósito original y preservando la sana convivencia en la ciudad.