117 colombianos han sido repatriados desde el Líbano, un país en crisis por los recientes ataques. Esta operación humanitaria, anunciada por el canciller Luis Gilberto Murillo, es solo el comienzo, ya que se espera un segundo vuelo para evacuar a más connacionales en los próximos días. ¿Qué significa este esfuerzo para quienes aún buscan salir del país? Descúbrelo a continuación.
Este jueves, a las 8 a. m., aterrizó en el Comando Aéreo de Transporte Militar (Catam) en Bogotá el primer vuelo humanitario que trajo de vuelta a 117 colombianos repatriados desde el Líbano, país sumido en una grave crisis tras la ofensiva israelí en la región. En este vuelo, organizado por el Ministerio de Defensa, la Fuerza Aérea, la Unidad de Gestión de Riesgo, la Cancillería y Migración Colombia, llegaron principalmente mujeres, personas de la tercera edad, 50 menores de edad e incluso algunas personas acompañadas de sus mascotas.
El canciller Luis Gilberto Murillo describió esta operación como “muy compleja”, destacando la labor del embajador colombiano en Beirut, Edwin Ostos, y el personal consular que, según él, “arriesgaron sus vidas” para garantizar que los ciudadanos fueran evacuados de manera segura. A pesar del peligro, la Fuerza Aérea logró asegurar tanto la seguridad de la tripulación como la de los connacionales que regresaron al país.
De acuerdo con cifras de la Embajada de Colombia en Líbano, un total de 664 colombianos residen en ese país, de los cuales 344 están registrados en zonas de alto riesgo debido al conflicto. Se estima que al menos 20 personas más están en lista de espera para regresar en un segundo vuelo humanitario, que se llevará a cabo en cuanto las condiciones lo permitan.
El canciller Murillo también subrayó que la instrucción del presidente Gustavo Petro es garantizar la seguridad de todos los colombianos en el exterior que se encuentren en peligro. Además de los vuelos de repatriación, el gobierno colombiano está enviando ayuda humanitaria para apoyar a la población civil en Líbano y Gaza, en coordinación con otros gobiernos de la región como Egipto y Jordania.
Esta primera misión representa un esfuerzo significativo para asegurar la protección de los colombianos en medio de la creciente tensión en el Medio Oriente, y aunque el desafío es grande, las autoridades aseguran que seguirán trabajando para evacuar a todos aquellos que lo necesiten.